Día siguiente a la mañana, teníamos que dejar el hostel. Charlamos sobre si íbamos al castillo de Bled, llegabamos antes a Ljubjana ó íbamos al principal destino turístico de Slovenia, unas cuevas, las cuevas de Postojna (la j suena como i en esloveno).
Estas cuevas son impresionantemente grandes, y son producto de las filtraciones de años y años de agua. En ellas se encuentan estalactitas naturales formadas por las gotas, al igual que las inversas que son generadas por el lugar donde cae el agua y también se pueden ver pilares que es donde las estalactitas formadas en el techo y las formadas en el piso se unen. Está sumamente lindo para ver.
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| bueno muchachos, no salgan del trencito ni rompan las estalactitas... jaja me hizo cagar de risa esto |
Para ingresar a ellas, hay que pagar una entrada excesivamente cara: 22 euros para estudiantes y 27 para adultos. Te dan un lugar en un trencito que hace 2 kms, según la guía, y luego se hace 1 km caminando por adentro de las profundidas y escuchando a la guía que le va explicando todo a un grupo enorme de gente. Todo en inglés, pero en Eslovenia hay tours en esloveno, italiano y algún idioma más que ahora no recuerdo.
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| Tengo que reconocer que saque las fotos mas feas del mundo, pero bueno... |
Dentro de las cuevas hacía un friazón bárbaro, entre 8º y 10º es la temperatura interior dela cueva, mientras que en las afueras hacía por los menos 35º. Francisco, no quiso entrar porque le parecía muy caro así que dimos vueltas con Juan y el Papu. Tipo 4 y media, terminamos nuestra visita y salimos para Ljubjana. Obviamente, tuvimos que esperar al papu que se cambie los pantalones y haga todo lo posible por tomarse su tiempo.
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| Con Juan Pablo en las cuevas de Postojna, re cagados de frio |
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