Viena: que ciudad limpia! reencuentro con Johana

La salida de Praga fue divertida sin mapas, sin nada. Nos despertamos con el negro, le prometí que compraríamos algo en el camino (cosa que no hicimos) y fuimos a buscar a Pablo y Laura, que habían dejado el auto en su hotel.

Así emprendimos el viaje hacia Viena, no hubo mayores sobresaltos en el camino o al menos no tengo muchos recuerdos salvo el calor infernal que hacía adentro del auto, y el termómetro que no bajaba de 35 grados.

Catedral de Viena

Venecia: el punto final

Venecia es conocida por muchas cosas, por ser una ciudad que consta de 118 pequeños islotes unidos mediante puentes, por ser una ciudad para ir con la novia. A mi me tocó visitarla con el negro Iván, bueno no fue precisamente una visita de pareja pero estuvo bien jaja. Hablando en serio, después de atravesar los alpes y los maravillosos paisajes austríacos entramos en Italia. La tierra donde nadie respeta nada.

Bueno, no es Venecia pero es uno de los paradores que cruzamos en el camino. Si, si, una estación de servicio igual a las que uno se cruza de camino Córdoba - Buenos Aires :p

Berlín: reencuentro con Iván, el muro de Berlín y Berlín Oriental!

Esa noche cuando llegamos a Berlín, ya me había empezado a preocupar por el negro. Llego al departamento, no tenía conexión a Internet así que tuve que pagar por un acceso de un día, conecté mi computadora lo empecé a usar y me di cuenta que no había traído la batería así que la pude usar veinte minutos. Le dejé un par de mensajes, preguntandole donde estaba cuando llegaba pero ni respuesta.

Monumento Soviético a los caídos en la Segunda Guerra, el cual es mantenido por los alemanes

La Puerta de Brandemburgo

A la mañana temprano con Pablo y Laura salimos para la Puerta de Brandemburgo, pasamos por el parlamento y la plaza que tiene en frente. Tomamos un par de fotos, y pude finalmente entrar a Internet. Donde me encontré con varios mensajes de Iván, que me había mandado hace una hora. El tipo tranquilo me estaba esperando hace una hora en la estación central de Berlín.

Dejé a los chicos, y me fui a buscar a Iván pensando que no lo iba a encontrar nunca! Pero ahí estaba mi negrito querido en la estación principal de trenes!

Berlín: la llegada!

Tras finalmente lograr salir de Frankfurt, y tomar las rutas que habíamos marcado en la hoja de ruta todo venía al pelo. Tuvimos muchas horas y con muchísimo calor dentro del auto, y 100km antes de Berlín me cansé y le ofrecí a Pablo que maneje. Se acobardó como el mejor, así que Laura sin ningún problema asumió el control (ahora vemos quien tiene bien puesto los pantalones de los dos!).

Todo bien, con la diferencia que Laurita no está muy acostumbrada a ir mirando los carteles con las máximas que cambian cada 3 o 4 km, así que veníamos haciendole carreritas a todo el mundo en Berlín. En Alemania, las autopistas tienen máxima ilimitada en ciertas partes pero hay otras que no funciona así y hay que estar atento especialmetne en los cruces o donde hay construcciones. Pero bueno, no pasó nada.

Cuando íbamos entrando, Pablo iba de copiloto señalando la entrada que teníamos que tomar, y Laura venía tomando todas bien hasta que Pablo dijo cualquiera y Laura se metió por otra. Pablo dice... "Noooooooooooo, te tenías que meter por la otra! No vamos a llegar nunca, noooo". De todos modos, estábamos bastante cerca y al rato ya llegamos al departamento.

Con Pablito en la Columna de la Victoria (Grosser Stern)

Frankfurt: El reencuentro con Pablito y Laura!

En 2013, a Pablo se le ocurrió hacer un maratón de turismo por Europa. Se vino a hacer un curso de derecho penal a la Universidad de Salamanca. Dado que no quería venir a Nancy porque no le interesaba en lo más mínimo, me ofreció que nos encontremos en otro lado. Aunque me había dicho que la verdadera razón era porque yo estaba harto de mostrarle Nancy a todo el mundo que venía. En fin... (Primer párrafo, primer palo).

Con Pablo en Frankfurt as Main

El 6 de julio salí de Nancy camino hacia Frankfurt, después de haber dormido dos horas por el cansador viaje al recital Eurockeenes. Salí de Nancy con el GPS de Gaetán, que me lo prestó muy copadamente. Decidí hacer Covoiturage así no viajaba solo los 300km, y se inscribieron para venir conmigo dos tipos de Guinea. Dos locos bien bronceados, uno medio parco y el otro super simpaticón. Nos subimos al auto, y al principio no encontraba en el GPS donde tenía que ir, así que pusimos las coordenadas manualmente.

Venía todo espectacular en el viaje, divirtiendome con los chicos estos hasta que entramos en Alemania. Resulta que Gaetán, le había puesto unos mapas hackeados por no se quien así que las rutas partían en todos los sentidos, el GPS que andaba como el culo... Para darle la razón al pa, había que mirar antes la hoja de ruta. Lo peor es cuando vez las opciones en la Autopista (Mandebourg, Aleehazwurst, etc...) está imposible. Así que haciendo un poco de fuerza, imaginandome para donde tenía que ir seguí los carteles hacia Maans, y luego empalme con otra ruta que iba hacia Frankfort. En vez de hacer 300 km hice 450km pero bueno. Al final, creo que yo ya tenía una cara de culo bárbaro y el loco de Guinea seguía diciendo giladas. Un grande!