Mi bella, o como solía ser |
El día anterior me había puesto a arreglar mi bici, me había esforzado a full para que quedase a punto y por primera vez en un par de meses podía usarla.
Como siempre la envidia del destino...
Cuando apareció Esteban, empezamos a andar. Cruzamos el primer cruce importante. Miramos el semáforo que seguía y había que pegar una acelerada para pasar en naranja. Pasamos, tranquilos.
Justo en esa cuadra, hay un supermercado y una salida de autos. Un viejo en un 306 venía saliendo del supermercado (donde había una señal de STOP) y nosotros veníamos por la vía del tranvía.
Claramente, el viejo no nos vio y se metió en la mitad de la vía del tranvía y empecé a tratar de frenar. Estaba el suelo todo mojado, así que los frenos no reaccionaban. Esteban lo esquivó por la derecha, yo puse los frenos al máximo, los pies en el piso y no había caso la velocidad no reducía. Así que terminé frenando, pero contra el auto. Un golpazo en la puerta del tipo, y salí volando por encima del auto. Choqué con el parabrisas, frené con la rodilla en el capó y rodé hasta el piso.
Tras el golpe, calculo que el viejo todavía no entendía nada. Yo me levanté enseguida y fui a buscar mi bicicleta, la levante y me fui al cordón. En ese momento, Esteban se cagó todo y vino a ver que pasaba. La gente siguió caminando por la calle, y nadie exterior vino a ver si me había pasado algo.
El hijo del tipo, que iba atrás, vino a ver si me había pasado... Se hizo olimpicamente el pelotudo, me dijo que no me había visto (aunque no era él quien manejaba), y yo poco más le dije que se vaya... Creo igual que fue mi culpa de chocarme un auto que estaba parado :P.
De todos modos, no tengo ningún rasguño, nisiquiera dolor en la rodilla. Cuidado autos de Nancy porque sigo vivo! Aunque a mi bici le salió cara la jodita y creo que su vida útil terminó.... Que en paz descanse!
César que susto!!! Ojalá no tengas ninguna consecuencia.
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